«Los Versos Satánicos», de Salman Rushdie

Los Versos Satánicos del autor británico de origen hindú Salman Rushdie, es una novela de ficción que fue publicada en 1988, convirtiéndose rápidamente en una de las más controvertidas obras de la literatura a nivel mundial. El libro fue rechazado y vilipendiado por la comunidad musulmana internacional y en la India fue prohibido, además de que desató pronunciamientos de protesta por parte de los creyentes islámicos, por su representación de algunos temas muy sensibles, tales como las esposas del profeta Mahoma y la supuesta infalibilidad del Corán.
En esta obra los eventos son narrados en primera persona, de manera inusual, por un relator omnisciente, porque la historia está relatada por el diablo, quien a veces habla directamente al lector y se refiere a sí mismo en primera persona. Sin embargo, al ser éste un ser sobrenatural, narra desde todas las perspectivas, a veces contando los mismos sucesos más de una vez, desde dos o más perspectivas distintas.
Los Versos Satánicos es una obra que está escrita en tiempo pasado, y su título se refiere a un evento registrado en algunos relatos de la vida de Mahoma, en el que él creía erróneamente que las palabras del diablo eran versos de revelación angelical. En esos versos parece que se reconoce a tres diosas como seres divinos cuyo favor es de desear. En la historia, que es cuestionada por muchos eruditos y generalmente se cree que es inexacta, Mahoma luego dice que los versos no son de Alá, sino de Satanás, y llegaron a ser conocidos como los «versos satánicos», lo cual explica el título de la novela, en la que Rushdie incluye un relato ficticio de esta historia como una de las secuencias de los sueños de Gibreel Farishta.

Si bien es cierto que esta obra de Salman Rushdie aborda las creencias y prácticas religiosas del islamismo, esto resulta ser solamente un aspecto de la alusiva y compleja novela que produce amplios y pretenciosos comentarios sobre el problema filosófico y religioso del bien y el mal. De hecho, la obra está inmersa en consideraciones sobre la cultura  y la política británica y del Sur de Asia; aborda, asimismo, una variedad de temas concernientes a identidades étnicas y culturales, asiáticas y africanas inmigrantes en particular, y se enfoca en la estética literaria y la naturaleza de la verdad.
Todas estas ideas están incorporadas en una memorable narrativa en la que sobresalen Gibreel Farishta y Saladín Chamcha, personajes de identidades muy complejas, indo-británicos,  ambos atrapados en una batalla épica que se desarrolla entre Londres y Bombay, en la década de 1980.
En esta fantástica narración, los dos personajes empiezan a adquirir cualidades sobrenaturales y visitan mundos alternos, tales como el de los sueños prolongados de Farishta en torno al profeta Mahoma. Esta obra ha sido mal interpretada por algunas audiencias, y ha sido difamada; pero también ha fascinado a muchas otras, y más que todo, logró abrir un debate internacional sobre la censura y el rol de la literatura en el desarrollo humano. Después de que el Ayatollah Khomeini de Irán emitiera una «fetua» (decreto judicial islámico), en el sentido de que se asesinara al autor y a todas las personas que habían tomado parte en su publicación, la novela se hizo conocida en todo el mundo y provocó varias crisis diplomáticas entre países, como la de Gran Bretaña e Irán.
Nota aparte: Increíblemente, este libro –cuando recién publicado en español– circuló entre los amantes de la lectura de los campamentos compartimentados en el norte del departamento de Morazán, entre los cuales me encontraba yo, habiendo causado en mí una impresión que no muchos libros logran.

Deja un comentario