Conociendo Acerca de la Artritis

¿Qué es la artritis? La palabra artritis significa inflamación de la articulación. Sin embargo, de la forma en cómo la palabra se usa, artritis comúnmente se refiere a cualquier problema crónico que se presente en la articulación. La forma más común de artritis es la osteoartritis. Es la artritis que generalmente nos afecta conforme avanzamos en edad, o sea con la vejez, y causa deformaciones en los nudillos de los dedos, rodillas inflamadas, dolor en la espalda u otras articulaciones.

La osteoartritis no es causada por la inflamación, aunque a veces puede resultar en la inflamación de la articulación. No se conoce la causa específica de la osteoartritis, pero involucra la degeneración o desgaste de las terminaciones cartilaginosas de los huesos. Por la degeneración, las superficies óseas se hacen ásperas y no se deslizan suavemente. Al desgastarse el cartílago que protege el terminal óseo, el hueso crece en forma de espuelas (llamadas osteofitos) lo que genera un abultamiento en los dedos de las manos, o los espolones en el pie. Al rozar estas espuelas óseas o superficies ásperas, la superficie celular de la articulación se irrita produciendo una mayor cantidad de fluido sinovial. Este fluido extra resulta en edema o hinchazón.

Hay muchas clases de artritis debido a la inflamación. Las formas más comunes son aquellas causadas por enfermedades reumáticas, tales como la artritis reumatoide, y enfermedades metabólicas como la gota y psoriasis. Con estas enfermedades, la superficie que cubre o protege la articulación se inflama e hincha, y también secreta fluido extra. Como resultado, la articulación se hincha, se siente caliente, se enrojece y se pone más sensible. Si la inflamación de la artritis no se controla y dura un periodo largo, puede resultar en la destrucción del cartílago y el hueso. Tal destrucción puede finalmente conducir a deformidad. La causa de la inflamación asociada a estas enfermedades no se conoce precisamente, pero con respecto a la gota se relaciona claramente a la formación de cristales de ácido úrico en el fluido articular. Se piensa que las enfermedades reumáticas se deben a una forma de auto inmunidad (una reacción alérgica o inmune del cuerpo en contra de sí mismo).

La mayoría de enfermedades artríticas no solo afectan la articulación sino también todos los tejidos que la rodean. Las articulaciones están cruzadas por tendones de los músculos adyacentes, los cuales mueven las articulaciones, y por ligamentos que estabilizan a las mismas. Cuando la superficie articular se inflama, o la articulación se hincha o deforma, estos tendones, ligamentos y músculos se afectan. Pueden inflamarse, hincharse, estirarse, desplazarse, adelgazarse o aún romperse. También en muchos lugares donde los tendones o músculos se deslizan entre sí o entre huesos, existen superficies lubricadas para hacer el movimiento fácil. Estas superficies se llaman bursas; con la artritis también se inflaman o se hinchan causando bursitis. Cualquiera que sea el tipo de artritis no solo afecta la articulación, sino también puede afectar todos los elementos o tejidos que la rodean.

Fuente

Tomando Control de su Salud, tercera edición, Bull Publishing Company.