El Poder de La Rosa Roja: Conclusiones y Reflexión Final

Por Fidel A. Romero

Ha sido muy aleccionador haber reanudado transitar mentalmente el camino recorrido en mis años azarosos en donde hubo derroche de voluntad y sacrificio, fraternidad y entrega, amistad y fidelidad; en donde no hubo tiempo para asimilar la verdadera enseñanza de los sucesos, sino que el tiempo era ocupado para hacer y reaccionar ante esas circunstancias extremas en que fuimos envueltos sin buscarlas; en donde fueron seguidos los lineamientos políticos de la organización y los valores familiares aprendidos en el seno donde crecí. Ahora sí es posible ver lo que en aquel entonces estaba oculto, ya sea por la compartimentación, ya sea por intención o por el torbellino del tareísmo para cumplir la responsabilidad asignada, confiando totalmente en quienes dirigían y eran depositarios de toda la información posible para ejercer su función, despojándose muchas veces del sentimiento humano para actuar como políticos con un extremo pragmatismo. Esto era entendido en ese tiempo como dedicación al proceso revolucionario y no como realmente lo era: tener poder, hacerlo crecer, defenderlo y mantenerlo.

Viene a mi memoria un pequeño párrafo que alguna vez leí en un trabajo referido al poeta Roque Dalton:

«… La hermandad entre los luchadores sociales es propia para los idealistas, pero la lucha por el poder es descarnada, sangrienta, solo los ingenuos pueden creer que en el poder se hermanan los hombres, en verdad se destruyen…»

Al revisar los hechos bajo la lupa del análisis y comparándolos entre lo que nos consta y la información pública de diferentes fuentes consultadas, podrían sacarse algunas reflexiones y conclusiones:

1- Previo a la guerra civil declarada en EL Salvador, el país era depositario del mayor nivel de organización y acción de un movimiento civil jamás visto. Este movimiento era tan fuerte que derrocó al gobierno del General Romero, obligando a la juventud militar a que asumiera el Estado y a que la embajada de Estados Unidos moviera sus hilos de poder para integrar diferentes corrientes políticas y religiosas, incluyendo una parte de la misma izquierda representada en la corriente opositora a la lucha armada. Implementaron un programa reformista para robar banderas del movimiento civil y revolucionario, pero su programa fracasó al ser desenmascarada la maniobra reformista por el accionar de otra parte de la izquierda que se lanzó a las barriadas populares a dar las orientaciones del caso, que produjeron levantamientos insurreccionales parciales. El nuevo gobierno, autodenominado ‘Junta Revolucionaria’, no dudó en sacar las unidades de blindados y los cuerpos represivos de siempre para desalojar violentamente de las barricadas a sus opositores.

2- El apoyo mostrado públicamente a la Junta por parte de la izquierda, no solo trajo confusión al poderoso y bien organizado movimiento civil con la consecuente división causada en el mismo, sino que también produjo una recomposición y reagrupamiento de las fuerzas reaccionarias que les permitió incrementar la persecución y represión para el desmantelamiento del pueblo organizado. En ese marco asesinan a Monseñor Romero para enviar la señal de que, si lo habían asesinado sin importar repercusiones, podrían asesinar a cualesquiera. Centenares de líderes obreros, estudiantes, religiosos, maestros, etc., fueron asesinados o desaparecidos.

3- Al fracasar la maniobra reformista, la izquierda que había apoyado a la Junta renuncia para reintegrarse al resto de la izquierda que era partidaria de la lucha armada, conforman las alianzas hasta llegar al FMLN en octubre de 1980. Estos sectores últimos en integrarse constituyeron el grupo minoritario militarmente hablando. Sin embargo, eran los de mayor experiencia en la lucha parlamentaria y conspirativa, además de estar alineados a la corriente internacional con lineamientos del Partido Comunista de la Unión Soviética, extinta desde 1990, después de caer el muro de Berlín y la guerra fría.

4- Los operativos a zonas rurales fueron incrementados, presionando a desarrollar una milicia rural que fue el germen o núcleo de lo que fueron los frentes de guerra. La milicia se armó artesanalmente con los recuperes locales hasta darse lo que se llamó la Ofensiva Final o la guerra civil declarada, iniciándose así una carrera competitiva positiva entre las dos organizaciones mayoritarias del F5: FPL y ERP, quienes tenían mayor trabajo rural a nivel nacional y, principalmente, al centro norte y oriente norte del país, respectivamente.

5- Las unidades mayores del FMLN fueron creadas en forma no simultánea y con experiencia desigual, lo que limitó no solo los niveles de coordinación y accionar militar, sino que también fueron limitados los efectos de las acciones al ejército nacional. De esta manera, se enfrascaron en una guerra civil mayoritariamente rural que no solo sustituyó al accionar civil de la década anterior, sino que lo desarticuló y desmovilizó, haciendo predominante la acción militar sobre lo político.

6- Las contradicciones al interior de la Comandancia General fueron poco conocidas en detalle; sin embargo, fueron sentidas en varios aspectos que evidenciaba la falta de unidad real. Esta fue conformada por presiones de los aliados cubanos y no por convencimiento propio; las disputas internas por hacer prevalecer la línea llevó a cometer acciones deplorables, tales como los asesinatos cometidos al interior de la dirección de las FPL en abril de 1983. La verdad sobre estos hechos no es pública ya que hubo una versión oficial y trabajo para que fuera aceptada como tal. La imaginación es florida para explicarse ese hecho en lo político, moral, legal, legítimo, etc. Después de esos hechos, hubo cambios sustanciales en la plataforma de gobierno asumida en la primera reunión de la C.G. en guerra en diciembre de 1983, cuando sin mayor explicación la plataforma de luchar por un gobierno democrático y revolucionario es cambiada por un gobierno de amplia participación a inicios de 1984. Esta es la plataforma que dominó en adelante, con la cual se estableció un dialogo y luego la negociación hasta pactar los Acuerdos de Paz. Las posturas revolucionarias enarboladas al inicio del conflicto quedaron abandonadas en el camino.

7- La dirección del ERP no solo construyó y canalizó primero los recursos logísticos provenientes del exterior para su militancia y para el FMLN en su conjunto, sino que también fue capaz de formar la primera unidad mayor de fuerza estratégica que la denominó Brigada Rafael Arce Zablah (BRAZ). Esta, conducida por un activo Estado Mayor y bajo la visión de un colectivo de Comisión Política, coordinado por Joaquín Villalobos, inició una operatividad casi continua e ininterrumpida hasta quemar prácticamente la estructura que fue desarticulada 15 meses después de haber sido juramentada y reducida a casi un 25% del total inicial…, que a sus inicios fue juramentada con 1800 hombres y mujeres. El incremento de los medios aéreos sirvió como argumento para su desmontaje, reorientando su remanente en unidades pequeñas para distribuirlas en el terreno y reforzar un trabajo político de expansión que había quedado reducido en la etapa de accionar de la unidad mayor, lo cual contribuyó al desbalance entre la bajas producidas en el accionar y la reposición de las mismas.

8- El accionar militar predominante e ininterrumpido de la BRAZ tenía a la base un cálculo exitista de hacer colapsar al ejército gubernamental en un año, con la adición de las unidades en formación del resto del FMLN, para simultanear acciones mayores a nivel nacional. Este fue el riesgo mayor que la Dirección del ERP tomó con su estructura militar: Cuando las unidades de las organizaciones hermanas del FMLN estaban listas para el accionar mayor, su emblemática unidad BRAZ estaba lista para ser desmontada. Esto no solo produjo desgaste al ejército gubernamental, sino que también su propio desgaste, traducido en reducción y agotamiento de los combatientes de la heroica estructura militar. Como consecuencia, también se produjo un escalonamiento intervencionista que prolongó la guerra. La guerra se integralizó, pasando a ser el elemento político dominante en ambos bandos…, con una diferencia abismal en recursos de todo tipo. El salvador fue convertido en un laboratorio experimental dirigido por los expertos de la armada USA, creando la doctrina de guerra de baja intensidad que vino a sustituir la guerra contrainsurgente.

9- Una cuña independiente fue introducida en los frentes rurales en el momento de mayor beligerancia y ascenso en el accionar militar con unidades mayores de la guerrilla. Infiltrados de la CIA, que además vinieron a fortalecer los equipos de inteligencia de los cuarteles, integralizando la guerra al crear otro escenario en la guerra de inteligencia y contrainteligencia. Las estructuras represivas de la vecina Honduras fueron fortalecidas creando un batallón 3-16 como base para las operaciones encubiertas, como fue el caso del infiltre abortado en Morazán por el ERP. Allí fue librada una batalla victoriosa cuya dimensión puede medirse solamente al conocer los efectos que hubo en otros frentes, como el caso del frente Paracentral. En este frente, la batalla ideológica y de inteligencia del Coronel Campos Anaya de la 5a. Brigada en San Vicente sembró la duda y desconfianza en la Dirección de las FPL, lo cual tuvo como resultado una multitud de fusilados dentro de las mismas filas guerrilleras en un período de unos cuatro años. La guerra de inteligencia y contrainteligencia fue otro elemento introducido en la vorágine del escalonamiento de la guerra civil, produciendo efectos diferidos en cada organización. Es un tanto curioso que no tengamos información sobre los infiltres y efectos sucedidos al interior de la FAL. Y nos preguntamos: ¿Será porque los infiltrados eran tan insignificantes o pequeños que no fueron considerados para invertir en cuadros para neutralizarlos? ¿O será que los dirigentes eran demasiado preparados que podían detectar y neutralizar tempranamente esos esfuerzos de contrainsurgencia? ¿O será que ocultaron ese tipo de información? solo ellos saben a qué se debió. La cosa del poder trastoca a la persona que lo ostenta y la convierte en un guerrero conservador para defender ese poder obtenido, olvidándose de los principios colectivos. Si el poder trastoca las debilidades humanas…, la guerra enloquece y hace sacar lo mejor y peor en la creatividad de los protagonistas para avanzar y alcanzar ese poder.

10- Una estructura militar rebelde como la creada en los años de la guerra civil salvadoreña, que asumió la responsabilidad principal de hacer la revolución con sus acciones militares, fue capaz de quitar el poder militar a la institución castrense para entregarlo al sector político que pactó en la negociación. Sin embargo, este sector político no fue capaz de hacer el triunfo revolucionario por haber anulado y desmontado el movimiento insurreccional que obligó a la juventud militar a dar el último golpe de Estado en El Salvador. Curiosamente, la facción de la izquierda que apoyó el proyecto reformista de la juventud militar, dividiendo y confundiendo al movimiento de masas con esa acción, son ellos quienes predominaron como funcionarios públicos después de la firma de los Acuerdos de Paz. EL ERP recompuso su estructura militar y accionó eficientemente a su nivel para las últimas dos ofensivas de la guerra. Estas ofensivas presionaron por la negociación y arribar a acuerdos, pero al terminar la lucha armada el ERP fue desintegrado y la mayoría de sus cuadros dispersados emigraron al exterior. Una reputación nada agradable fue ganada por las negociaciones y acuerdos hechos por la dirigencia, debido al hecho que esos acuerdos al igual que los puntos de la negociación firmada fueron hechos sin consultar a su base, con una atención política centrada al proceso electoral y no a resolver las causas que originaron la sublevación armada. Esto mismo es parte de lo que contribuyó a su desintegración.

11- Los costos sociales pagados, medidos en vidas humanas, fueron alrededor de ochenta mil muertos, una gran cantidad de pérdidas económicas materiales. Los costos mayores intangibles tales como la fractura familiar, la desprotección del civil, las viudas y los huérfanos sin padres, los desplazados, los lisiados físicos y mentales, etc., es la parte desconocida y escasamente tratada en el conflicto que vivió El Salvador. Las repercusiones de eso no fue materia a integrar en el proceso negociador…

12- El servicio de inteligencia del Estado con toda su red desplegada a nivel nacional desempeñó un papel importante en la radicalización del campesino, eliminación física, división familiar y solución de disputas personales por la vía política-ideológica. Lo mismo sucedió prácticamente al otro bando insurgente, en donde no hubo condiciones y muchas veces voluntad política para tratar los casos catalogados como infiltres o espías. El terror y disputas estuvo a la base de grandes cantidades de asesinatos en ambos bandos, lo cual dividió no solo a la familia, las comunidades sino que a la sociedad en general.

13- Es conocido de sobra los epítetos con los que identificaron al ERP en la historia de su existencia: locos militaristas, coyunturalistas, y otros. Al final de la guerra, quien escribe este trabajo tuvo acceso a las cifras de combatientes desmovilizados por las Naciones Unidas, fue sorpresa que el número de desmovilizados por el ERP fue el mayor del FMLN. Todos creían y siguen creyendo que la fuerza mayoritaria era las FPL. Lo anterior hace preguntarnos: ¿Por qué razón las FPL tenían menos combatientes en sus estructuras al final de la guerra?…, ¿por qué razón los locos militaristas al final tenían más personal que desmovilizar después del periodo de 12 años con un protagonismo mayúsculo en las acciones bélicas…?

14- Durante la existencia del ERP como organización es conocido todo su aporte en lo más álgido de la lucha en el proceso revolucionario salvadoreño hasta su disolución orgánica. Como fue dicho antes, fue acreedor de muchos epítetos despectivos hasta llegar a cargar con la «verdad oficial» de la Comisión de la Verdad, de que fue el ejecutor intelectual y material en el magnicidio perpetrado contra Herberth Anaya. Sin embargo, su máximo dirigente se negó a aclarar ante dicha Comisión ese hecho, haciéndose autocrítico en parte de lo conocido públicamente en otros asuntos, dejando por sentado que quien calla otorga. Eso fue un error garrafal histórico, a menos que hubiese intereses ocultos desconocidos para la organización. Por lo tanto, si nos preciamos de justos y haciendo honor a la verdad histórica, jamás debemos juzgar y condenar a una organización por errores o compromisos individuales de alguno de sus miembros.

15- Podríamos afirmar que los «dirigentes revolucionarios» del FMLN histórico, al final del proceso y de la realidad que ellos habían interpretado que tenían en el periodo del proceso negociador de los Acuerdos de Paz, solo tenían dos opciones: Aceptar lo poco que podía salvarse de la revolución o perderlo todo. De esa forma ellos fueron insertados transformándose en un partido político, fortaleciendo con esto al sistema que combatían, complaciendo al poder oligárquico criollo y mundial; aplazando de esta manera la concreción de las aspiraciones populares de autodeterminación y una vida con justicia social. En pocas palabras, los dirigentes salvaron aunque fuera solo el sombrero del ahogado, del proceso revolucionario. Salvaron el sombrero para usufructuarlo en forma elitista, aprovechando la acumulación del dueño del sombrero, el FMLN histórico convertido en fmln electoral, hasta que surja otro movimiento que integre esta experiencia y pueda evitar que existan ahogados.

16- El estudio y análisis hecho sobre el origen y aplicación de métodos por los servicios de inteligencia y sus redes de las SII, para obtener información de disidentes y opositores políticos, por parte de la inteligencia del Estado, en cuanto a los porcentajes afectados en la población civil, según las bases de datos consultadas desde Argelia hasta El Salvador, son elocuentes en ser muy semejantes los porcentajes de víctimas. Del 100% de las respectivas bases de datos solo el 10% estaban con algún nivel de vínculo directo con los competidores políticos o con los insurgentes, el 90% de los afectados eran víctimas civiles inocentes; sin embargo, todos fueron tratados con el mismo rigor en la tortura y desaparición. Lo dicen los escritos de Argelia que de los 120 mil capturados como sospechosos solo el 10% estaban ligados al Frente de Liberación Nacional beligerante, pero igual todos corrían la misma suerte: los torturaron y desaparecieron…, toda esa experiencia y métodos fueron trasladados a las dictaduras del cono sur. El libro amarillo, encontrado casualmente en la ciudad de San Salvador en el año 2013 solo es una pequeña muestra de esa verdad inocultable sucedida en los 20 años de conflicto.

17- Al comparar todos esos hechos queda clara la idea que somos parte de un todo, de un sistema de convivencia político, económico social en donde toda está relacionado de alguna manera. Y como parte de ese sistema en el periodo en que nos correspondió vivir, encontramos que las fuerzas beligerantes y conservadoras de ese conflicto, sus servicios de inteligencia para sacar las verdades a los prisioneros políticos…, por más que se le busque, salvo excepciones y limitaciones de tipo logístico, no son encontradas mayores diferencias…, en los métodos que ocuparon buscando los efectos y resultados. Son los alumnos aventajados aplicando la experiencia recibida de los franceses y de la CIA. Y si vemos con ojo crítico después de 23 años de finalizada la guerra civil, tomando en cuenta lo sucedido en los aparatos de inteligencia, por haber conocido lo sucedido al interior del ERP con los infiltrados de la CIA de origen hondureño, los escritos sobre el Paracentral, con sus testimonios de sobrevivientes…, no queda más que sentirse orgulloso del trabajo de inteligencia y contrainteligencia realizado en colectivo con Marcelo Cruz Cruz, al parar un proceso en forma profesional y ético que pudo haber desencadenado algo similar a lo sucedido en el Paracentral 4 años más tarde. Crece la leyenda, se agigantan las imágenes de nuestros héroes y mártires que vencieron la muerte con su práctica firme en defensa de los derechos humanos y del pueblo en general, tales como monseñor Oscar Arnulfo Romero y Galdámez, Herbert Anaya Sanabria, Roque Dalton, Enrique Álvarez Córdoba, para mencionar solo a cuatro. Estos, entraron por la puerta ancha en la historia para dejarnos un legado ético y moral sobre su práctica, es el hombre nuevo que jalonea y muestra sendero a la sociedad en su búsqueda por la construcción de una vida mejor.

18- En Nicaragua, el asesinato de un periodista con una conducción política unificada desencadenó la insurrección popular hasta derrocar la dictadura de Anastasio Somoza. Mientras que en El Salvador el asesinato del arzobispo Oscar Arnulfo Romero y Galdámez encontró a un movimiento de masas dividido y confundido por las directrices sin unificación en estrategia de los dirigentes político-militares que se autodenominaron la Vanguardia. Esto permitió una recomposición de las fuerzas reaccionarias para mover sus piezas, desarticulando ese poderoso andamiaje que daba cuerpo a ese movimiento de masas. Esa desarticulación con la intensa represión desatada generó condiciones inmejorables para la multiplicación de una guerrilla rural anulando al movimiento civil. Este, después de cuatro años de guerra abierta y agobiado por la crisis económica, logró resurgir para reclamar su postura en el proceso. Sin embargo, el movimiento civil no alcanzó el empuje y energía necesarios como para desembocar en una insurrección popular como en Nicaragua, pero sí con planteamientos antiguerra para ambos bandos…, presionándolos para el fin de la guerra civil sin alcanzar las metas revolucionarias del inicio.

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